La palabra
Nuestra voz nos vuelve luz, nos vuelve sombra
Te construyo en palabras y verbos
mientras te veo y te oigo
te siento y me sientes
Nuestras palabras santas
llevan el germen de nuestros diablos
que saltan sobre sus tridentes
y se ríen en nuestro hombro
Se ríen de nuestros juegos
de nuestros pequeños juegos
Nuestra voz nos vuelve sombras
en esos momentos perdidos
dónde se me pierde la luna, la montaña
y te odio tanto
cómo para blasfemar sobre
tu existencia.
Nuestra voz nos vuelve llama
cuando me pierdo en las ideas
de tu respiración en tu garganta
y de tu piel
del sabor de tu piel.
Te construyo en palabras y verbos
mientras te veo y te oigo
te siento y me sientes
Nuestras palabras santas
llevan el germen de nuestros diablos
que saltan sobre sus tridentes
y se ríen en nuestro hombro
Se ríen de nuestros juegos
de nuestros pequeños juegos
Nuestra voz nos vuelve sombras
en esos momentos perdidos
dónde se me pierde la luna, la montaña
y te odio tanto
cómo para blasfemar sobre
tu existencia.
Nuestra voz nos vuelve llama
cuando me pierdo en las ideas
de tu respiración en tu garganta
y de tu piel
del sabor de tu piel.
Comentarios
ninguna está libre de la esencia de quien la emite
todas y cada una se visten de caricias o lápidas oxidadas
las palabras...en ellas existimos
besitos besitos de luz